Reseña: El sueño eterno, de Raymond Chandler

El sueño eterno
Saga detective Marlowe 1
Raymond Chandler
Alianza Editorial / 2004
240 páginas

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"El sueño eterno" supuso la fulgurante irrupción de Raymond Chandler (1888-1959) en el ámbito de la novela negra. Tomando como modelo en muchos aspectos a Dashiell Hammett, principalmente en la concepción de esta clase de relatos como reflejo y crítica de una sociedad más que como propuesta de acertijo o enigma a resolver, Chandler inició, con su apuesta por su detective Philip Marlowe y su inconfundible sentido del humor, una de las vetas más ricas del género. En "El sueño eterno" –novela repleta de nervio y de ingeniosos diálogos– es un caso de chantaje el que lleva a Marlowe a asomarse a las alcantarillas de una sociedad en apariencia espléndida".

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Hoy os traigo una nueva reseña, (con la esperanza de que esto se convierta en costumbre y podáis ver más a menudo mis opiniones sobre lo que voy leyendo, que ya toca). En esta ocasión, se trata de la reseña de la única lectura que he finalizado en este mes (de momento, que yo soy muy optimista, vamos, ¡un iluso!). Como sabéis, siempre leo al empezar el mes la lectura conjunta que organizamos, y una vez más he logrado acabarlo prontito, así que aquí tenéis mis impresiones:

El sueño eterno  funciona y muy bien como presentación de un personaje que se repite en varias entregas más, un personaje que para mi gusto, es el que ha hecho que siga con interés una trama algo simple, sin muchos sobresaltos ni grandes misterios. El detective privado Marlowe, tiene tanto carisma, que consigue que te olvides de la trama, y simplemente disfrutes (al menos en mi caso) de los diálogos y sus peculiaridades sociales, por decirlo de alguna manera. Marlowe no tiene pelos en la lengua.

Vayamos poco a poco. Para empezar, me encontré con una narración en primera persona, es el mismo Marlowe quien nos hace avanzar en la historia de chantajes, desapariciones y algunos secretos de familia. Pero no interactua mucho con el lector, no nos habla directamente, es un narrador algo frío a la hora de describir, muy directo, pero sin muchas anotaciones o comentarios personales sobre cada escena. Es a través de los diálogos donde vemos el humor negro y ácido de este personaje, que no se acobarda ni le debe más cortesía a nadie por tener una fortuna, sus intervenciones han sido un soplo de aire fresco en una trama que parece desdibujarse, a mi al menos me pareció muy suave, como si lo realmente importante fueran los personajes, y sus perfiles, que debo decir que todos son muy fáciles de recordar e identificar, peculiares, en su mayoría excéntricos, pero encantadores.

Chandler introduce en la historia dos importantes personajes femeninos, que junto a Marlowe, protagonizarán varias de las escenas más interesantes y hasta divertidas de la historia. Son dos mujeres muy distintas, hermanas además. Dos tentaciones, dos bellezas con las que le tocará lidiar, algo que se le da de maravilla sin ninguna duda.

La auténtica bomba argumental, la tenemos en las últimas páginas, que a modo de desenlace, nos da un giro que si bien uno se lo puede oler, no es ni de lejos lo más esperado, a mi me consiguió pillar desprevenido hasta el final, y ya se sabe que si un libro convence con su final, ya lo tiene todo casi ganado. A mi me ha convencido rotundamente, porque como digo, Marlowe es un auténtico entretenimiento, con bromas y un cinismo dignos de aparecer en las televisiones de hoy en día, muy al estilo del Dr. House, por citar un ejemplo (en nada me pongo a ver esas clásicas adaptaciones que tuvo esta obra con un reparto de lujo, por cierto). Y aunque la trama se me ha quedado algo coja, eso no ha hecho que me aburra en ningún momento. Raymond Chandler, encantado, espero verle de nuevo por aquí.

A través de Twitter ha habido de todo, desde los que lo han disfrutado hasta quienes han sufrido para llegar al final ¿que tal vosotros?