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¡Lágrimas de ceniza ya está en papel!

 ¡ Hola, familia ! Oficialmente la primera entrada del año en este blog llega casi a finales de febrero, efectivamente, pero por una buena causa. Lágrimas de ceniza ya está disponible en papel en las principales plataformas de venta de libros y librerías seleccionadas.  Y no va a ser la única protagonista de la jornada de hoy. ¡Vamos a ello! Toca empezar por el principio, y ese no es otro que haciendo honores a lo que acontece. Universo de letras ha publicado la edición en papel de mi última novela, misma editorial que hizo posible el lanzamiento en papel de Recuerda y Rododendro . Es un grupo editorial que además de ofrecer servicios de autopublicación, mantiene un acuerdo con el Grupo Planeta , motivo por el que ha sido posible lanzar estas versiones en papel. El formato de impresión es el mismo usado con Recuerda y con Rododendro , para respetar la continuidad en mis trabajos, mismo tamaño y mismo acabado en efecto mate. Ahora vienen las sorpresas.  Para la ocasión, hemos decidido

Mis lágrimas de ceniza, segunda parte

Muy buenas tardes en esta primera semana de febrero, mes del amor, del carnaval y el más cortito del año. La semana pasaba arrancamos con esta serie de entradas centradas en presentar la novela que saldrá al mercado este año, Lágrimas de ceniza. Así que hoy seguiremos con ese proceso alcanzando la segunda parada.

Esta novela, como recordaréis, tiene una importancia vital si tenemos en cuenta que fue la que me sacó, literalmente, de ese bloqueo que duró años y, de hecho, más que un bloqueo era una renuncia a la escritura narrativa. Todo eso ya lo comentamos en la última entrada, que podéis ver pinchando en este enlace antes de seguir leyendo, si es que os la perdisteis.

Os comenté que puse el punto final al borrador de la novela en diciembre de 2020, justo para pegarme unas navidades llenas de ilusión y muy satisfecho por haberlo conseguido. Las disfruté muchísimo, pero en cuanto los Reyes Magos se dejaron caer por aquí, con el roscón aún en el gaznate, tocaba ponerse manos a la obra. En esas semanas de descanso, la novela reposó en su cajón, y era el momento de comenzar revisiones, reescrituras y eliminar cabos sueltos, incoherencias y los mil quinientos errores que tenía, porque sí, con los borradores, un servidor siempre ha sido el caos personificado.

El objetivo era tenerlo todo listo para, en febrero, hacerle llegar esta historia a mi editora habitual en Click Ediciones, puesto que, por contrato, les debía un trato prioritario a ellos. Le comuniqué, tras cuatro años, que seguía vivo y de hecho me encontraba terminando una nueva novela. El entusiasmo que mostró me animó mucho a dar esas últimas pinceladas y logré cumplir el objetivo de ponerla en sus manos antes de acabar el mes.

Como podéis imaginar, el proceso editorial y sus esperas son el pan de cada día para quien escribe, y yo ya sabía que la cosa iría para largo. Así que durante ese tiempo, tendría que buscar la forma de seguir adelante, no volver a estancarme. Mi problema, es que cuando comienzo un proceso editorial, en el que aún no sé si la novela llegará a ver la luz, no soy capaz de darla por finalizada y pasar a otra cosa. Por ello, aunque intenté pasar página y lanzarme a un nuevo proyecto, la idea no cuajó y estuve dando tumbos hasta que, finalmente, decidí retomar aquel manuscrito que dejé a medias cuando todo se fue a pique en el lejano 2016.

Aquí hemos venido a hablar de Lágrimas de Ceniza, por lo que las desventuras por las que pasé el pasado 2021 en lo referente a ese nuevo proyecto, las dejaremos para próximas entradas, pero como adelanto, la historia, en la que aún sigo creyendo, me dio muchos quebraderos de cabeza, pero actualmente estoy en pleno desarrollo, de nuevo, y la cosa por fin marcha. Recapitulando, durante el tiempo de espera, estuve dando tumbos entre un proyecto y otro, apuntando ideas, disfrutando de mucho cine, videojuegos y en busca de documentación e inspiración, a la par que seguía escribiendo artículos sobre videojuegos.

Muy pronto, Lágrimas de Ceniza se unirá al resto de mis obras publicadasYa no solo era un tema de obligación contractual, es que, tal y como están las cosas en el sector, y lo difícil que es ser "visto" por una editorial, yo no tenía en mente otro plan más que el de volver a publicar con Click Ediciones,  el grupo que me dio la oportunidad de comenzar. Como esta novela era para mí una especie de renacimiento, quería que fueran ellos los que me dieran las alas. Y finalmente, todo salió bien y a mediados de verano, llegó la esperada noticia. Mi editora me confirmó que creía en la historia, que había vuelto a conseguirlo, y que la publicarían encantados.

Tras aquella conversación con mi editora, acordamos realizar algunos ajustes en la estructura de la novela y yo propuse un par de cambios narrativos, por lo que concretamos una fecha aproximada en la cual yo entregaría el manuscrito con estos cambios, y ya pasaríamos a la firma de contrato

Como podréis imaginar, cualquier otra ocupación dejó de existir, literalmente, y solo tuve ojos, una vez más, para mis Lágrimas de Ceniza. Los nuevos ajustes no me llevaron más de un par de semanas, por lo que la firma de contrato y esa ansiada confirmación de que la novela llegaría al mercado pronto, llegaron con mucha ilusión, por fin sentí que volvía a tener un camino que seguir, uno que yo mismo me había marcado y del que no pensaba volver a desviarme.

Y tras este final de párrafo tan poético y almibarado, os dejo hasta la semana que viene, en la que ya terminaremos con este repaso a todo lo que ha acontecido el proceso creativo de esta novela que tanto significa para mí. En ella he imprimido muchos miedos, muchos sentimientos y hay tantos matices en sus personajes y sus tramas, que siento que he conectado con ellos de una forma que no me había pasado nunca. Y estoy deseando que alguien más, en cualquier parte del mundo, pueda sentirlo.

Muchas gracias por dejaros caer por aquí una semana más, ¡nos vemos en 7 días!

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